sábado, 1 de enero de 2011

Maratón de exámenes pre-operatorios

El doctor me dio una lista de exámenes que debía hacerme... ¡muchísimos!

Tarde "atiné" que las isapres tienen lugares en donde tienen convenios y a veces los exámenes salen muy baratos o a costo cero. En fin, al menos algunos me hice a bajo costo o sin pagar :)

Otra cosa que hay que tener en cuenta es que ¡hay que llevar la orden! Sí, un par de veces se me olvidó y tuve que volver otro día, cuec.

Endoscopía, espirometría, ecocardiograma dopler, los típicos de laboratorio (¡me sacaron sangre en cantidades industriales), test de esfuerzo (¡uf!), ecotomografía... ya ni me acuerdo de todos, pero creo que me demoré un poco más de dos semanas en hacérmelos todos.

Y cuando creí que había terminado la odisea fui al doc y... resulta que la endoscopía arrojó que tenía esofaguitis crónica, o sea, había que ver qué tipo de reflujo tenía yo para ver si con la operación se sanaría, y si no... no había operación buaaaaa.

Lo que yo entendí es que habían dos tipos de reflujo: uno por acidez y otro porque la tapa del esófago está floja (dicho bien brutamente). Si tenía la segunda, era causa de la obesidad y, por ende, superable con la operación.

Y los exámenes para cotejar todo esto no eran nada de agradables: el primero creo que se llama manometría y te meten una sonda por la nariz para ver la presión que hace la tapa del esófago que, en mi caso, era casi nula. Ese examen dura unos minutos.

Pero el segundo dura ¡24 horas! y es el de la foto: una sonda más delgada conectada a un dispositivo parecido al Holter para la presión, que mide el pH del reflujo durante todo el día. Al comer pan, por ejemplo, la sonda me tiraba la nariz. No era muy cómodo que digamos, ni tampoco muy estético, pero ¡todo por la causa!

Estos últimos dos exámenes no se los tienen que hacer todas las personas que se operarán, sólo las que tienen reflujo, como yo.

Y llegué al doc con las buenas noticias: tenía el reflujo superable con la operación y no el del pH, emitió el informe y comenzaron los trámites, ¡se venía la operación!